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Caída mortal, Joanna Wylde
Editorial: Libros de seda / 09 mayo 2016 ISBN: 9788416550012 Papel: 18,95€ Páginas: 352
Editorial: Libros de seda / 14 abril 2016 ASIN: B01E9RVZR6 Ebook: 7,99€ Páginas: 352
Género: Erótico
Serie: 5º Reapers MC
Nunca quiso hacerle daño.
Levi «Painter» Brooks no era nada antes de entrar en los Reapers. El día que consiguió su parche, se convirtieron en sus hermanos y en su vida. Todo lo que le pedían a cambio era un brazo fuerte y su lealtad incondicional. Y esa lealtad se pone a prueba cuando le atrapan y le condenan a pena de cárcel por un crimen cometido en nombre del club.
La vida de Melanie ha empezado siendo muy dura y, con el tiempo, ha aprendido que debe luchar por su futuro. Por suerte, ha escapado del infierno y ahora puede empezar de nuevo. Sin embargo, es incapaz de dejar de soñar con las caricias de un motero al que no puede olvidar. Todo empieza de una manera tan inocente: un tipo solitario en la cárcel, unas cuentas cartas… Amables. Inofensivas. Inocentes.
Pero cuando Painter salga de la cárcel… Melanie tendrá que hacerse a la idea de que, entre los Reapers, no hay nada de inocente.
Quinta
entrega de la serie de los moteros Reapers. En esta ocasión es el turno de
Painter, que ha aparecido en mayor o menor medida en todos los libros de la
serie y Melanie que conocemos de Obsesión total, el libro justamente anterior a
este.
Painter se nos presenta desde el primer libro como alguien que vive por y para el club. Alguien serio, inaccesible, peligroso. Que disfruta de las mujeres pero no quiere absolutamente nada con ellas. Literalmente las utiliza y las olvida. No quiere ningún tipo de preocupación respecto a ellas. Pero no sabemos si es simplemente Melanie o su estancia en la cárcel que sobrelleva con el apoyo de las cartas de ella lo que hace que cambie radicalmente, pero respecto a ella lo hace. Me gusta mucho su personaje porque es valiente respecto a sus sentimientos y no teme expresarlos. Es todo un machote, pero eso no quita para decir lo que piensa aunque pueda parecer cursi y granjearse las risas de sus hermanos moteros.
Melanie es una chica seria, responsable. No ha tenido mucha suerte respecto a sus padres y sus primeros años de vida no han sido muy buenos que digamos. Pero es una luchadora nata y ha tenido la suerte de contar con London (protagonistas del 4º de la serie) que ha ejercido de madre. Sabe que Painter no es la mejor opción, sabe que estar con él puede acarrearse sufrimiento, pero no puede evitar sentir lo que siente, está inevitablemente enamorada de él.
Me encanta el estilo de esta escritora, si bien es verdad que suele tener un leguaje fuerte, rudo y, a veces incluso, soez, pero es tan fluido, tan dinámico, con unos diálogos tan buenos que me resulta un auténtico placer leer sus libros. Me encanta saber lo que sienten y piensan los protagonistas, me gusta su sentido del humor y como llegan, incluso, a reírse de sí mismos. También me gusta cómo se dirigen directamente al lector, me hacen sentir como si fuera un personaje más del libro.
En esta ocasión el tema del club resulta un tanto más duro. En todo momento la autora ha insinuado las actividades de estos clubes y lo que llegan a hacer para no ser descubiertos o delatados, pero en esta ocasión lo explica todo un poco más concretamente y he sentido un poco de rechazo, pero es lo que hay, así suelen ser este tipo de grupos de moteros y todo ello le da mayor realidad al libro.
Es una muy buena continuación de la serie. Estoy deseando ponerme con el siguiente libro, actualmente hay pocas autoras que me hagan disfrutar de la lectura tanto como ella.
Valoración: 8
Painter se nos presenta desde el primer libro como alguien que vive por y para el club. Alguien serio, inaccesible, peligroso. Que disfruta de las mujeres pero no quiere absolutamente nada con ellas. Literalmente las utiliza y las olvida. No quiere ningún tipo de preocupación respecto a ellas. Pero no sabemos si es simplemente Melanie o su estancia en la cárcel que sobrelleva con el apoyo de las cartas de ella lo que hace que cambie radicalmente, pero respecto a ella lo hace. Me gusta mucho su personaje porque es valiente respecto a sus sentimientos y no teme expresarlos. Es todo un machote, pero eso no quita para decir lo que piensa aunque pueda parecer cursi y granjearse las risas de sus hermanos moteros.
Melanie es una chica seria, responsable. No ha tenido mucha suerte respecto a sus padres y sus primeros años de vida no han sido muy buenos que digamos. Pero es una luchadora nata y ha tenido la suerte de contar con London (protagonistas del 4º de la serie) que ha ejercido de madre. Sabe que Painter no es la mejor opción, sabe que estar con él puede acarrearse sufrimiento, pero no puede evitar sentir lo que siente, está inevitablemente enamorada de él.
Me encanta el estilo de esta escritora, si bien es verdad que suele tener un leguaje fuerte, rudo y, a veces incluso, soez, pero es tan fluido, tan dinámico, con unos diálogos tan buenos que me resulta un auténtico placer leer sus libros. Me encanta saber lo que sienten y piensan los protagonistas, me gusta su sentido del humor y como llegan, incluso, a reírse de sí mismos. También me gusta cómo se dirigen directamente al lector, me hacen sentir como si fuera un personaje más del libro.
En esta ocasión el tema del club resulta un tanto más duro. En todo momento la autora ha insinuado las actividades de estos clubes y lo que llegan a hacer para no ser descubiertos o delatados, pero en esta ocasión lo explica todo un poco más concretamente y he sentido un poco de rechazo, pero es lo que hay, así suelen ser este tipo de grupos de moteros y todo ello le da mayor realidad al libro.
Es una muy buena continuación de la serie. Estoy deseando ponerme con el siguiente libro, actualmente hay pocas autoras que me hagan disfrutar de la lectura tanto como ella.
Valoración: 8
Cris/keke
Junio 16
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