Conspiración en la noche, Jezz Burning

Conspiración en la noche, Jezz Burning

Editorial: Terciopelo / Julio 2010 ISBN: 9788492617616   Ebook: 4,00 €  Paginas:
Editorial: Terciopelo / Marzo 2010 ISBN: 9788492617333   Rústica: 17,00 €  Paginas:368

Género: Paranormal

Serie:4º Saga Lycos

Selenia despierta en una furgoneta en algún lugar de Estocolmo. Como Pura entrenada por la milicia lico sabe perfectamente lo que esperan de ella. Deberá seguir a rajatabla las órdenes que le llegan al móvil. La primera será contactar con un atractivo y peligroso lico para comunicar a sus superiores lo que se trae entre manos. 
Varulf, el sueco, siempre ha sido el lico más enigmático. Sus acciones y palabras dan pie a pensar que se trata de un ser presuntuoso, chulesco y arrollador: un canalla increíblemente atractivo cuyo poder de seducción arrastrará a Selenia a un huracán de sensaciones y pensamientos contrapuestos.
Pero unirán sus fuerzas en busca de un fin común, aunque a primera vista parezca que tienen objetivos distintos. Ella intentará llevar a cabo su misión de acabar con la amenaza que supone el sueco y él tratará de resolver, de una vez por todas, la conspiración que comenzó siglos atrás y que le obligó a renunciar a todo lo que le correspondía por derecho propio.

 

El camino fácil o el difícil.

Ya lo he dicho en otras ocasiones, creo que justo con la crítica del libro anterior a éste.
Pero es muy difícil hacer críticas de libros cuyo autor conoces. En este caso no es que conozca a la autora, es que la considero una de mis más queridas amigas. Y puedo decir con orgullo que he vivido en primera persona todo el embarazo y parto de Varulf. Supongo que Raquel siempre ha tenido claro lo que hacía o no su sueco, pero yo no, a mí me tenía a expensas de algún que otro comentario…
Pero vamos a empezar por el principio.

No sé si mucha gente lo sabe, pero existe una cosa que se llama “La lobera”, «La lobera…» suena un tanto sectario, pero no deja de ser un café virtual de amigas que nos reunimos por la noche ante el pc para charlar de lo que se tercia.

Poco después de entregar Noche de ofrenda, Raquel se puso manos a la obra con el libro de Varulf, por entonces así era cómo lo conocíamos, «El libro de Varulf», aún no tenía título ni nada. Y un día, en una de esas ventanas del Messenger surgió una bonita discusión.
Raquel nos planteó que tenía dos caminos a seguir, uno fácil y más convencional, y otro difícil y lleno de retos. ¿Cuál era el reto? Pues contar parte de la historia hacia atrás, en lo que desde entonces llamamos el «efecto Memento».
En su momento me pareció una idea muy interesante y muy difícil de llevar a buen término. Tenía fe ciega en que Raquel podría conseguirlo, pero… me parecía todo un desafío. Y además, como ya habíamos visto en otros libros, Varulf es un caballo desbocado cuyas riendas, según la propia autora, son muy difíciles de manejar.

Recuerdo que al principio me imaginé todo el libro contado al revés… y me dije que eso debía resultar imposible de escribir y que, si lo conseguía, no lo iba a entender ni Dios.
Fue un tema del que no volví a saber nada hasta que me leí el libro, y en ese momento todavía era el Libro de Varulf, porque creo que fui la primera persona que lo leyó y seguía sin tener título.
Me sorprendió lo bien que lo había conseguido; por supuesto, no ha escrito un libro «al revés», pero en la línea temporal del argumento algunas cosas las descubrimos volviendo hacia atrás. Concretamente en cuatro ocasiones si no lo recuerdo mal.

Por otro lado, recuerdo también la discusión sobre el nombre de Selenia, para las más curiosas decirles que antes fue Selene y Valeria. Y quedó Selenia porque empieza por S y su diminutivo es Lena. Un pequeño guiño a nuestras Mari y Sofía.

Hablando de guiños, en el libro hay unos cuantos que he prometido no desvelar jamás ni bajo amenaza vikinga.

Fui testigo de la cantidad de documentación que recopiló Raquel en su periplo con Varulf, la cantidad de horas buscando en libros, en el google, la cantidad de mails que intercambió con Christer, el sueco de verdad que tiene un corazón enorme, y cómo disfrutaba contándonos cada pequeño logro que encajaba en su lugar como las piezas de un puzzle. Por si alguna se lo pregunta, sí, existe un pub en Estocolmo que se llama BarCelona. Justo donde sale situado en el libro.

También recuerdo cómo buscó una abadía en los alrededores de Estocolmo que sirviera como escenario. Y cómo, con el libro ya terminado, seguía esperando que la Embajada sueca le enviara no sé qué documentación que le hacía falta para cerrarlo todo.
Por eso, comprenderéis que no puedo hacer una crítica al uso. A lo largo de este año, Raquel ha hablado de Varulf, de Selenia, de Trece, de Davor con la misma naturalidad que hablaba de su familia. Nos ha pegado en la ventana la primera vez que Varulf y Selenia “casi” se acuestan, y también cuando se acostaron de verdad. Impresionantes ambas escenas. Aunque también nos tocó ser las primeras en «oler» la ventosidad de Trece, así que va lo servido por lo comido.

También recuerdo haberle oído decir «ese sueco es que me agota» como si estuviera hablando de Didac, su hijo. Y ser las primeras que vieron a Varulf a través de los ojos de Selenia. Y en darle unos tirones de orejas cuando una escena no nos acababa de gustar… y es que, imaginaros, llego a plantearse «matar» a Davor… Por supuesto, tuvimos que amenazarla con no hablarle en un mes. Y es que Davor es el contrapunto perfecto al sueco, casi tanto como Selenia, pero en otro aspecto…

Así que yo, lo único que puedo decir de Conspiración en la Noche es que es un libro cojonudo, que tengo una amiga que es un genio y que lo ha bordado. Que es un 10 completo y redondo. Y que a ver qué hace… que dónde está el Pimpollo.

Puntuación: 10

circe