martes, 15 de diciembre de 2015

Como en una montaña rusa, Susan Elizabeth Phillips

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Como en una montaña rusa, Susan Elizabeth Phillips

Editorial: B de bolsillo /5  Febrero 2014 ISBN: 9788498729078 Bolsillo: 9,95€ Páginas: 520
Género: Contemporáneo 
Serie: Independiente

Honey Jane Moon es una pequeña sabelotodo, valiente e inteligente, pero mal preparada para convertirse en la más famosa estrella infantil de América... a pesar de que no es tan joven como todo el mundo cree.
¡Cuidado! ¡Honey va a manejar a los hombres de su vida loca! Entre ellos Eric Dillon, un ardiente "chico malo" y uno de los actores más talentosos de Hollywood. Y Dash Coogan, el último de los héroes vaqueros, un hombre atrapado en una pantalla demasiado pequeña para contener una leyenda.
Cuando Honey se enamora, lo hará de la única manera que sabe: con todo su corazón.



No es que el tema del libro sea de lo más original y novedoso, todas hemos leído en otros libros historias que se desarrollan en rodajes, que una humilde muchacha llega a lo más alto del estrellato, la lucha de un sin fin de personajes que buscan salir adelante en multitud de situaciones, pero Como una montaña rusa resulta un libro original en si mismo y por las diferentes historias que se entrelazan entre si formando el libro, por como van interactuando los diferentes personajes entre sí y con terceros. Todo esto me ha atrapado y ha hecho que me costara dejar de leer hasta el final.

En cuanto a los personajes:
Honey, es un personaje que me ha cautivado. Por su fuerza, por su orgullo, por su obstinación. No creo que sea un personaje que evolucione en el sentido estricto de la palabra, sí madura, pero siempre mantiene su forma de ser y de enfrentarse a todo, de forma arrolladora.
Me ha encantado su concepto de familia y todo lo que ella implica: amor, lealtad, entrega, dedicación. El hecho de haber recibido todo el amor, en la persona de su madre, y después tener una falta casi total de él siendo tan pequeña, condiciona toda su vida y se convierte en uno de los centros de su existencia.
Dash, el último héroe del Oeste americano. Es tal su carisma que en sus actuaciones se interpreta a si mismo. Es un hombre con cicatrices, con historias de desaciertos a sus espaldas, pero se cree que peor de lo que en realidad es, es un buen hombre y lo demuestra en numerosas ocasiones. Huye de Honey porque no quiere responsabilidades y porque piensa que solo puede hacerle daño.
Eric, joven guapo y de gran talento. Una joven promesa con los pies en la tierra, pero con un pasado dramático que le hace ver todo de color gris. Tal es su dolor en determinados momentos que se refugia en sus personajes para aliviarlo. Es un personaje que si va evolucionando, aunque recibe algún que otro baquetazo, va cambiando y desarrollando su personalidad y para bien.
Chantal, un personaje que es tan acomodaticio, con tan poco ímpetu que se ve arrasado por la fuerte personalidad de Honey. Al principio me inspiró rechazo, luego tristeza y finalmente me sentí orgullosa.
Liz, no es que tenga un gran papel, pero la menciono porque siempre andaba pendiente de Honey, primero intentando ayudarla desde la sombra, dando algún que otro empujoncito a Dash y, más tarde, cuando la propia Honey se lo permite, directamente.
Lilly, pasa casi de puntillas en la vida de Honey pero afecta, y de gran manera, a Eric. Le cambiará al principio para bien, pero luego le asestará un duro golpe. Es el único personaje que no me cuadró mucho y cuyo comportamiento no me pareció, no voy a decir lógico, que en situaciones extremas no parece haber lógica que valga, pero si poco real.

Por todo esto ha sido un libro que me ha enganchado. Me encanta como cuenta las historias de forma tan amena y envolvente que te atrapa desde el primer minuto de lectura.
Es cierto que me gustan mucho más los libros en los que añade algún que otro momento cómico que suaviza la intensidad de las situaciones límites, dramáticas y conmovedoras, que viven los personajes o sencillamente no viven experiencias límites. Pero cuida tanto sus personajes, desarrolla tan bien a los secundarios, cuenta historias tan entrañables y tiernas que solo puedo decir que me encanta.

Valoración: 8,5


Cris/Keke




Honey acaba de perder a su madre, una pequeña huérfana, con la única compañía de unos tíos y una prima que la aceptan pero no la comprenden, se siente sola, abandonada, fuera de lugar, ella lo único que quiere es una familia, que la quiera, que la acepte, en el que ella sea su universo y ellos el suyo, pero no lo va a tener fácil, ya desde temprana edad tendrá que hacerse cargo de sus parientes, demasiado pronto para hacerse adulta sin haber tenido ni tiempo para tener niñez.
Y de la mano de Honey entraremos en un viaje legendario donde nuestro corazón y nuestros sentimientos se sentirán como si continuamente estuviéramos subidos en la gigante montaña rusa del parque de nuestra protagonista.

La vida da muchas vueltas y una de ellas es que la protagonista entrará a formar parte de una serie donde encontrará los dos pilares de su vida, Dash un maduro actor, que encarna la figura del vaquero de toda la vida, duro pero con un gran corazón, recto, leal y protector, lo que empieza como una búsqueda de la figura paterna se convertirá en un amor profundo, un amor que sanará el corazón de Honey, pero que también puede llegar a hacerle tocar fondo y Eric, un joven hosco, demasiado guapo, pero agresivo, siempre a la defensiva ya que la vulnerabilidad de la protagonista puede hacerle demasiado daño, es un joven con demasiados secretos, y con una sensibilidad que no deja que nadie descubra, pero la vida da demasiadas vueltas y algunas circunstancias de su vida le harán comprender que hay que arriesgarse, luchar por lo que se quiere para conseguir la verdadera felicidad.

Un trío espectacular, una evolución increíble con una historia conmovedora, tratando temas duros, controvertidos, e incluso llegando a límites donde me he sentido con el corazón en un puño. Ninguno de los personajes es perfecto, al revés todos tienen ese punto cruel, distante, e incluso cobarde que les hace vulnerables pero a la vez les fortalece, hacen que sientas una total empatía por ellos y que vivas la historia a través de sus miradas.

Una lectura compleja, no por la forma de escribirla sino por la cantidad de sentimientos que encuentras, la lectura es fluida pero hay tantas capas por descubrir que cuando hace un paréntesis en su lectura te deja pensativa, demasiados matices que poco a poco hay que descubrir.

Desde luego es una novela que no deja indiferente, llegas a amar y odiar a cada uno de los personajes, si además viene acompañado de unos secundarios magníficos que realzan a los protagonistas, y que nos hacen descubrir nuevas formas de ver la historia a través de sus ojos, puedo decir que es una novela sobresaliente, de las que dejan huella en quien la lee.

Valoración: 9

Rosamoni

 
 

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